14.4.09

86. Semana Santa y bando.

Cuanto tiempo sin escribir y hoy el día del bando, que mejor día para retomar el blog, auque sea con más pena que gloria y para resumir un poco lo que pasó y pasará, ya tendré tiempo para contar mi aventura americana.
El día de bando para algunos, porque aquí desde mi trabajo voy a disfrutar poco. Con lo que me gustan a mi lo lomos, sobrasadas, salchichas, morcillas,... de este día tan loco que tiene Murcia. Loco porque se empieza bien temprano y se acaba bien tarde, como cuando uno es joven, pero cambiando el parque por la plaza de las flores, los bocatas de prisa y corriendo por las barracas, la siesta en el parque, por un paseo por Gran Vía para disfrutar del desfile. Todo cambia con los años y yo este año en el trabajo, también lo va a cambiar.
Empecé ayer después de unas largas vacaciones, que empezaron siendo muy felices y ahora también lo son, pero de otra manera. Hoy me tocaba trabajar.
Con que cara llega uno y tras tres semanas y media de descanso matrimonial se pide un día de asuntos propios, así que este año desde mi casa y por la tele, cuando salga del centro, disfrutaré del bando de otra manera.

Todavía tengo cansancio de esta Semana Santa pasada que fue bastante intensa para mi, en todos los sentidos. Disfruté con las 4 procesiones en las que salí y no fueron cinco porque Dios no quiso, nunca mejor dicho. Con la penitencia y la pena por dentro, supe valorar cada paso dentro de la procesión, cada instante junto al Cristo, cada peso en los hombros y el dolor en mis pies descalzos de lo que me había dado Dios y de lo que le quedaba por mostrarme. Por eso las fiestas de primavera este año las añoraré desde la distancia aunque esté en la mismísima Murcia, me quedo con la Semana Santa pasada, seguro que no la olvidaré.

Foto: Cartel anunciador de la Semana Santa de la Alberca. Foto de mi amigo Nestor Lisón, magnífico cartel.

1 comentario:

Néstor Lisón dijo...

"supe valorar cada paso dentro de la procesión, cada instante junto al Cristo, cada peso en los hombros y el dolor en mis pies descalzos de lo que me había dado Dios y de lo que le quedaba por mostrarme"

Acertadas y bellas palabras. Un saludo y gracias por el cumplido.